Guía para cebar el mate como un experto

Paso 1: Calentar el agua

Este es quizás el paso más importante para preparar el mate perfecto, ya que de él va a depender el sabor de nuestra infusión. La temperatura ideal para cebar mates está entre 75°C a 80°C. Si el agua está por encima de esta temperatura, la yerba puede "quemarse", perdiendo sus condiciones naturales y sabores, mientras que si está por debajo de ésta, su sabor puede resultar muy amargo.

Una vez que tenemos el agua a la temperatura ideal, es importante contar un buen termo de doble capa de acero inoxidable que conserve adecuadamente la temperatura, para que mientras vamos cebando, el agua no pierda calor.

Paso 3: Introducir la bombilla

En el hueco donde colocamos el chorrito de agua, vamos a ingresar la bombilla, de manera que el filtro quede bajo la parte más alta de la pendiente de la yerba y la boquilla quede recostada sobre la pared opuesta del mate. Una vez que la bombilla haya ingresado, debemos evitar moverla, ya que esto puede contribuir a que la yerba tape el filtro.

Paso 2: Preparar el mate

Llena el mate hasta aproximadamente dos tercios de su capacidad con yerba. Es muy importante no llenar hasta el tope, ya que la yerba, al entrar en contacto con el agua, se hincha aumentando su volumen. Luego, tapa el mate con la mano e inclínalo hacia un costado, agitando suavemente para equilibrar sus sabores y generar una pendiente (la famosa montañita). Sobre la parte más baja de la pendiente, servir un chorro del agua de nuestro termo (a 75°C/80°C) y esperar a que se absorba. Esto último va hacer que la yerba se hinche y ayudará a prevenir que se tape nuestra bombilla.

Paso 4: Cebar el mate

Al acto de servir un mate se lo conoce como "cebar". Una vez que la bombilla está en su lugar, vierte un poco de agua cerca de ella, pero no encima, ya que el metal de la misma se puede calentar y provocar quemaduras. Este primer vertido se conoce como "primera cebada" y sirve para humedecer la yerba y liberar sus sabores. Deja que la yerba absorba el agua durante unos segundos antes de continuar. Luego completa con agua, sin llegar hasta la parte superior de nuestra montañita. Al cebar los mates, no debemos mojar toda la yerba de golpe. Vamos mojando poco a poco y reservando en un costado yerba seca; de esta manera, podemos controlar el rendimiento de la misma. Es decir, evitar que pierda su sabor de golpe y lograr que desde el primero al último mate, se pueda apreciar el sabor de la yerba.

Paso 5: A disfrutar de nuestros mates!

Ahora estás listo para disfrutar de tus mates. Coloca la bombilla en tu boca y sorbe el mate lentamente. Evita mover la bombilla mientras bebes para evitar obstrucciones. Una vez que hayas bebido todo el mate, vuelve a llenarlo con agua caliente y sigue disfrutando. La cantidad de yerba que entra en el recipiente (puede variar entre 30 gramos a 50 gramos) rinde para un litro de agua. Un buen cebador debe lograr que en ese litro de agua, desde el primer al último mate, se pueda apreciar el sabor a la yerba mate.

¡Disfruta de esta bebida reconfortante y compártela con amigos y seres queridos para vivir momentos inolvidables!